20 de Oct, 2023 . La primera infancia es un período crítico para el desarrollo del cerebro, que es importante para impulsar la cognición y el bienestar mental. Una buena salud cerebral a esta edad está directamente relacionada con una mejor salud mental, cognición y logros educativos en la adolescencia y la edad adulta. También puede proporcionar resiliencia en momentos de estrés.
Pero, lamentablemente, el desarrollo del cerebro puede verse obstaculizado por la pobreza. Los estudios han demostrado que la pobreza en la primera infancia es un factor de riesgo de un menor nivel educativo. También se asocia con diferencias en la estructura cerebral, peor cognición, problemas de conducta y síntomas de salud mental.
Ser rico también se ha relacionado con tener más materia gris (tejido en las capas externas del cerebro) en las regiones frontal y temporal (situadas justo detrás de las orejas) del cerebro. Y sabemos que estas áreas apoyan el desarrollo de habilidades cognitivas.
Nuestro estatus socioeconómico influirá incluso en nuestra toma de decisiones. Un informe de la London School of Economics encontró que la pobreza parece cambiar el enfoque de las personas hacia la satisfacción de necesidades y amenazas inmediatas. Se centran más en el presente, con poco espacio para planes futuros, y también tienden a ser más reacios a correr riesgos.
Pero ¿cuáles son las razones de estos efectos de la pobreza en el cerebro y el rendimiento académico? En última instancia, se necesita más investigación para comprender completamente por qué la pobreza afecta al cerebro de esta manera. Hay muchos factores contribuyentes que interactuarán. Estos incluyen la mala nutrición y el estrés en la familia causado por problemas financieros. La falta de espacios seguros y buenas instalaciones para jugar y hacer ejercicio, así como el acceso limitado a computadoras y otros sistemas de apoyo educativo, también podrían influir.
Nuestro estudio observacional muestra un vínculo dramático y positivo entre una actividad simple y divertida (leer por placer en la primera infancia) y una mejor cognición, salud mental y logros educativos en la adolescencia.
Analizamos los datos del proyecto Adolescent Brain and Cognitive Development (ABCD), un estudio de cohorte nacional de EE. UU. con más de 10.000 participantes de diferentes etnias y distintos niveles socioeconómicos. El conjunto de datos contenía medidas de adolescentes de entre nueve y 13 años y cuántos años habían pasado leyendo por placer durante su primera infancia. También incluía datos sobre su salud cognitiva, mental y cerebral.
Descubrimos que leer por placer en la primera infancia estaba relacionado con mejores puntuaciones en evaluaciones cognitivas integrales y mejores logros educativos en la adolescencia temprana. También se asoció con menos problemas de salud mental y menos tiempo dedicado a dispositivos electrónicos.
Nuestros resultados mostraron que leer por placer en la primera infancia puede ser beneficioso independientemente del nivel socioeconómico. También puede resultar útil independientemente del nivel de inteligencia inicial de los niños. Esto se debe a que el efecto no dependió de cuántos años de educación habían tenido los padres de los niños, que es nuestra mejor medida para la inteligencia de niños muy pequeños (el coeficiente intelectual es parcialmente hereditario).
También descubrimos que los niños que leían por placer tenían áreas de superficie cortical más grandes en varias regiones del cerebro que están significativamente relacionadas con la cognición y la salud mental (incluidas las áreas frontales). Es importante destacar que este fue el caso independientemente del nivel socioeconómico. Por tanto, el resultado sugiere que leer por placer en la primera infancia puede ser una intervención eficaz para contrarrestar los efectos negativos de la pobreza en el cerebro.
Si bien nuestros datos actuales se obtuvieron de familias de todo Estados Unidos, los análisis futuros incluirán investigaciones con datos de otros países, incluidos los países en desarrollo, cuando haya datos comparables disponibles.
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