La eyaculación precoz es una de las disfunciones sexuales más comunes entre los hombres. Existe un elevado porcentaje de hombres que no acuden al especialista porque no creen que puedan padecer esta disfunción, creen que no necesitan tratamiento o se dejan guiar por algunos mitos sobre la eyaculación precoz aunque estos no sean ciertos.
Actualmente, una gran parte de psicólogos, sexólogos y miembros de la comunidad médica han concluido que esta disfunción es debida fundamentalmente a la ansiedad. Además del propio malestar que ya genera el hecho de padecer eyaculación precoz, se puede generar más ansiedad. Esto suele pasar porque los hombres se centran tanto en el exterior de su cuerpo que son incapaces de percibir su nivel de excitación y, por tanto, las sensaciones anteriores a la eyaculación, provocando que no puedan controlarla.
A continuación, os explicamos algunos de los mitos sobre la eyaculación precoz más frecuentes:
La eyaculación precoz no se puede controlar.Claro que se puede controlar. Para ello, es necesario aprender a ser conscientes de las sensaciones que se van teniendo, dejar a un lado la ansiedad y la preocupación para poder controlar el reflejo eyaculador. Los expertos en sexología tienen técnicas que pueden ayudar y conseguir solucionarla.
La eyaculación precoz no tiene cura.Esta frase es un mito en toda regla. La mayoría de los casos de hombres que sufren esta disfunción, es por causas psicológicas, no por enfermedad. Existen factores como la ansiedad, el estrés, las preocupaciones o una alimentación poco saludable que pueden ser los causantes.
La eyaculación causa infertilidad.No existen evidencias científicas que demuestren que este hecho sea verdad. Sin embargo, si una pareja tiene pocas relaciones sexuales debido a la incomodidad o las dificultades que comporta esta disfunción, es normal que haya menos oportunidades para lograr el embarazo. Pero que un hombre padezca eyaculación precoz no significa que sea infértil.
El alcohol y las drogas frenan la eyaculación precoz.Hay personas que creen que consumir alcohol o ciertas drogas ayuda a retrasar la eyaculación. Nada más lejos de la realidad, lo que realmente ocurre cuando se consumen estas sustancias a largo plazo es que se puedan desarrollar otras disfunciones sexuales, con lo cual el problema solo se agravaría.
El exceso de masturbación causa eyaculación precoz.Si se ha adquirido el hábito de la masturbación rápida para enseñar al cuerpo a responder con rapidez y acelerar el orgasmo, la solución está en cambiar ese hábito. Si se trata de masturbaciones con calma, para centrarse en las sensaciones, entonces se favorece la consciencia y el autoconocimiento del cuerpo y de sus reacciones, y se mejora el control de las eyaculaciones.
Ahora que ya hemos desvelado algunos de los mitos más habituales sobre la eyaculación precoz, desde Misexólogo aconsejamos acudir a profesionales especialistas para encontrar la solución más adecuada a cada persona.
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