La vacuna anual contra la influenza sigue siendo una prioridad de salud durante la era del covid-19.
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15 de Oct, 2020 . Con el nuevo coronavirus todavía en circulación, "No sabemos cómo nos afectará esta temporada de gripe", dijo el teniente general del ejército Ron Place, director de la Agencia de Salud de Defensa. "Sabemos que vacunarse contra la influenza es un paso fundamental para que usted y su familia se mantengan saludables".
La influenza es una enfermedad respiratoria contagiosa. Se puede contagiar a otras personas hasta a unos 6 pies de distancia, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades. La gripe se transmite principalmente por gotitas de personas enfermas cuando tosen, estornudan o hablan. Estas gotitas pueden caer en la boca o la nariz de las personas cercanas, o pueden ser inhaladas hacia los pulmones.
La gripe puede estar asociada con enfermedades graves, hospitalizaciones y muertes, especialmente entre adultos mayores, niños muy pequeños, mujeres embarazadas y personas de todas las edades con ciertas afecciones médicas crónicas.
Una vacuna anual contra la influenza es obligatoria para los miembros en servicio activo, señala el Dr. Jay Montgomery, director médico del Centro de seguridad de vacunas de la División de atención médica de inmunización de la Agencia de Salud de Defensa. Él y otros expertos en atención médica recomiendan que, en general, todas las personas a partir de los seis meses de edad también deben recibirlo.
"Agregar la vacuna contra la influenza al distanciamiento social y el enmascaramiento reducirá el riesgo de contraer dos enfermedades respiratorias potencialmente graves muy juntas, lo que podría empeorar mucho el resultado", dijo Montgomery.
"Recibir la vacuna también significa que es menos probable que se exponga al COVID-19 si se sienta en un centro de atención de urgencia o en una sala de emergencias esperando que le traten los síntomas de la gripe", agregó.
Los niños deben ser vacunados incluso si las escuelas no vuelven a abrir por completo, dijo Montgomery. "La escuela no es el único lugar donde los niños pueden entrar en contacto con virus y bacterias que los enferman", dijo. "Los parques infantiles y las tiendas de comestibles también son ejemplos de lugares de exposición".
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