Todos conocemos la viagra, bien sea por uso directo, bien por las diversas “leyendas urbanas” que giran a su alrededor. De hecho, a causa de los “mitos” sobre este fármaco, muchos hombres ocultan que la consumen o sienten vergüenza por ello.
No obstante, no hay por qué sentir este tipo de sensaciones cuando se consume la viagra. Cualquier hombre que decide tomarla, o que su médico se la prescribe, debe pensar que la famosa pastilla azul no deja de ser un fármaco como cualquier otro.
El objetivo es cierto que va relacionado con la sexualidad. Sin embargo, la viagra no deja de ser una opción tan apta como cualquier otra para aumentar la líbido y la erección. Ni la disfunción eréctil es el fin del mundo, ni el uso de la viagra resulta un paso atrás.
La normalización del consumo de la viagra está, afortunadamente, cada vez más en boga. De hecho, el tema de este artículo es uno de los motivos por los cuales podemos afirmar que esto es así. La viagra amplía sus formas de uso, adaptándose a sus consumidores y ampliando horizontes.
¿La viagra? Ahora también en crema
Exacto, los hombres y pacientes que deseen consumir viagra también pueden hacerlo de forma externa, cutánea, a través de su nuevo formato: en crema.
La viagra en crema no consiste, exactamente, en lo mismo que su formato en pastilla azul, pero sí que ofrece el mismo estímulo sexual y eréctil a quien lo usa. Es decir, tratar la disfunción eréctil permitiendo que la erección suceda y se prolongue más tiempo, mejorando la vida sexual del paciente y su pareja.
El principal ingrediente de la viagra en crema es el alprostadil, una sustancia que ya existía en inyecciones y que se caracteriza por causar la dilatación de los vasos sanguíneos del pene. Como puede suponerse, el formato en crema resulta mucho más cómodo que las inyecciones para los paciente, de ahí que se haya extendido bastante su utilización.
Las inyecciones de alprostadil resultan dolorosas e incómodas, ya que la inyección debe realizarse directamente en el pene y esto no es plato de buen gusto. Afortunadamente, tras varias investigaciones, los científicos acabaron destilando un gel cuya acción se efectuaba a nivel local, ayudando a fortalecer la erección. El resultado es, efectivamente, la viagra en crema, cuyo nombre comercial es Virirec.
Aspectos positivos de la viagra en crema
Además de su aplicación en formato atópico, la viagra en crema ofrece algunos beneficios respecto a la dosis tradicional de alprostadil mediante inyección. Los aspectos positivos son los siguientes:
- Para que suceda la erección, no es necesario estimular al paciente de forma sexual ya sea mediante masturbación, visualmente o auditivamente.
- Al consistir en un producto en crema y no de ingesta interna (pastillas o inyecciones), presenta menos interacciones con otros fármacos o sustancias como el alcohol o alimentos específicos.
- El punto anterior permite que pacientes con diabetes, hipertensión y otros puedan utilizarla.
- El efecto es relativamente rápido en comparación al resto de fármacos: de 5 a 30 minutos después de la aplicación, la viagra en crema empieza a actuar.
Precauciones que debes tener en cuenta con la viagra en crema
Por supuesto, como cualquier otro fármaco, la viagra en crema también implica ciertas precauciones y contraindicaciones que deben tenerse en cuenta antes de utilizarla. Algunas de éstas son las siguientes:
- No es recomendado para pacientes cuyo médico no le recomienda mantener relaciones sexuales tras haber sufrido alguna enfermedad cardiovascular o cerebrovascular.
- Tampoco se recomienda en parejas cuya mujer está embarazada o están buscando el embarazo, a no ser que se utilice condón. Algo que en caso de buscar un embarazo es un poco contradictorio.
- En relación al punto anterior, las mujeres suelen sufrir irritación vaginal debido al alprostadil. Por ello no es muy aconsejable penetrar sin condón.
- En cuanto a su uso, se recomienda no utilizarlo más de una vez en un plazo de 24 horas. De hecho, el uso máximo que se recomienda es de 2 a 3 veces por semana.
- Respecto a su aplicación, ésta no resulta tan sencilla como parece a priori. Por ello es necesario que tanto el profesional médico como el paciente muestren interés por indicar y aprender a aplicar la dosis con la técnica adecuada.
En definitiva, la viagra en crema se alza como una de las alternativas más recomendadas y cómodas para los pacientes que deseen mejorar su vida sexual y controlar su disfunción eréctil. No debe ser tomada como el único tratamiento, sino como un complemento más.
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