La preocupación por una vida sexual satisfactoria parece estar, a priori, afincada en la juventud y la madurez. No obstante, muchas personas mayores, localizadas en el famoso grupo de "la tercera edad", también la tienen como prioritaria. De hecho no es nada extraño conocer a hombres y mujeres de más de 70 años que disfrutan habitualmente de una vida sexual plena y sana.
La tercera edad ocupa a todas aquellas personas mayores de 65 años, las cuales gozan o no de todas sus facultades. Los hombres y mujeres pertenecientes a esta fase de la vida siempre se han tildado de no tener libido o de sufrir muchos problemas alrededor de ello. Pero, ¿estos prejuicios o supuestas realidades son, todas ellas, ciertas? Veamos si es así.
El sexo en la tercera edad es posible y saludable
Exacto. El sexo durante la tercera edad no sólo es posible y real en muchos casos, también es saludable y beneficioso para la gran parte de personas. Tanto mujeres como hombres ven mejorada su salud en distintos grados, pero también su estado anímico y su autoestima.
De todas formas, existen enfermedades que pueden afectar a la práctica de sexo como, por ejemplo, la diabetes tipo I y II, la hipertensión, la angina de pecho y otras enfermedades o dolencias cardiovasculares y algunas otras. En general, las patologías que suelen afectar más directamente a la sexualidad son aquellas relacionadas con el aparato circulatorio, aunque todo depende de cada caso particular y de cómo gestione su enfermedad.
En relación a las medicaciones, debemos tener en cuenta que las recetadas para tratar las anteriores patologías sí que afectan negativamente al rendimiento sexual. La razón se encuentra en el efecto directo que ejercen sobre el flujo sanguíneo, del cual depende la erección masculina por ejemplo, y sobre el desarrollo hormonal, que interfiere en la libido.
Sin embargo, algunas de las causas por las que estos hombres y mujeres mayores no disfrutan de su sexo son, mayoritariamente, sociales y culturales. El sexo siempre se ha tenido en cuenta como tabú en nuestra sociedad. Este hecho implica que a su alrededor empiecen a surgir prejuicios como los que ya hemos comentado anteriormente.
Además debemos de tener en cuenta todos los prejuicios que también se han generado entorno a las personas de la tercera edad. Algunos de los más escuchados vienen de ellos mismos, es decir, estos hombres y mujeres afirman que no pueden tener sexo o que eso, en su edad, "ya no se lleva".
Por este motivo a lo que primero deben atacar los interesados es a su propio yo interior. En este punto, el sexo es exactamente igual en edades jóvenes que adultas o ancianas: el buen estado y equilibrio de la mente y del autoestima son la base para poder disfrutar del sexo. Luego si que existen otros factores externos que pueden afectar, pero estos ya son secundarios.
Los 5 beneficios principales del sexo en la tercera edad
- Beneficioso para la hipertensión y el aparato reproductor en mujeres: el sexo ejerce un efecto relajante tanto para hombres como mujeres; sin embargo en el caso de las féminas, esta relajación y aumento del flujo sanguíneo mejora su salud cardiovascular. Y en relación a las partes íntimas femeninas, una actividad sexual satisfactoria ayuda a ejercitar las paredes de la vagina haciendo que ésta se tonifique y esté más protegida.
- Aumenta la autoestima de hombres y mujeres: las personas producen más endorfinas y ven su autoestima mejorada, pues anulan el eterno cliché de que las personas mayores no pueden tener sexo. Asimismo, la producción de hormonas aumenta el buen estado de ánimo y el autoestima.
- Fortalece la musculatura y la estructura ósea: al ser un ejercicio físico de mayor o menos intensidad, tonifica la musculatura, activa el metabolismo y ayuda a mantener ágiles las articulaciones.
- Mejora y mantiene en buen estado el sistema inmunológico: la razón de este beneficio radica en el efecto positivo sobre la actividad de los leucocitos. Estos, al verse más activos y fuertes, ayudan a que los individuos se sientan con mejor humor y predispuestos a realizar más actividades.
- Reduce el riesgo de cáncer de próstata en hombres: la actividad sexual en hombres favorece a su aparato reproductor gracias a su efecto positivo en el sistema circulatorio. Este hecho ayuda a agilizar el sistema reproductor, los conductos y la producción de fluidos, evitando los problemas de obstrucción típicos en la próstata.
Como podemos observar, los beneficios del sexo en la salud de las personas mayores resulta evidente. Por este motivo no sólo es recomendable, sino necesario para evitar muchas problemáticas vinculadas con su salud física y psicológica. El sexo en la tercera edad debe estar presente en la vida de los hombres y mujeres, sin duda.
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