¿Cómo tratar la educación sexual?
La sexualidad es un tema que suele afrontarse de forma insuficiente, sobre todo en casa, donde se debe tratar con la mayor naturalidad posible. La educación en el campo de la sexualidad empieza cuando los niños y niñas son pequeños y es un proceso largo. Los intereses y las conversaciones variarán según la etapa de la vida en la que se encuentren.
Mantener una buena comunicación entre padres e hijos es esencial para generar confianza y un ambiente en el que se pueda hablar y obtener información fiable y segura. La educación sexual se debe tratar con normalidad para poder formar a los hijos desde pequeños y que, a medida que vayan creciendo, sepan tomar decisiones responsables.
¿Por qué es importante que la educación empiece en casa?
Los niños aprenden desde que nacen siguiendo modelos, que los encuentran en primer lugar en casa. Por eso es fundamental que la educación sexual empiece en el hogar.
Uno de los motivos por los que debe ser así es para enseñarles a valorarse, a conocerse y a respetar su cuerpo y el de los demás. También aprenderán a identificar situaciones que no desean y a evitar tomar decisiones precipitadas, que pueden ser perjudiciales para la salud y causar enfermedades de transmisión sexual.
Hablar sobre sexualidad
Como más información tengan las madres y los padres sobre este tema, podrán hablar con seguridad con los hijos. La sexualidad y todo lo que le rodea es más compleja de lo que creemos: también está relacionada con la afectividad, con el amor y con el placer, y tiene relevancia en el desarrollo y de la identidad de las personas.
Así que no se trata de un tema de mera importancia y para poder abordarlo plenamente, si se siente una falta de conocimientos para contestar a las preguntas de los hijos, se puede consultar o acudir a un profesional de la salud.
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