18 de Jul, 2021 . El sexo, el género y las intervenciones médicas para los jóvenes se han debatido ampliamente en las legislaturas estatales este año, con un número récord de estados que han presentado proyectos de ley que limitarían o prohibirían la atención que afirma el género para los jóvenes transgénero. La atención que reafirma el género es apoyada y reconocida como buena atención médica por organizaciones médicas profesionales y defensores de personas transgénero por igual. Si bien los legisladores estatales se han apresurado para evitar que los jóvenes transgénero reciban la atención que necesitan, sus proyectos de ley permiten que continúen las cirugías no consensuadas y dañinas en bebés intersexuales. En lo que los legisladores deberían centrarse es en prohibir estas intervenciones médicas innecesarias y peligrosas.
?Intersexual? es un término general que se refiere a personas con una o más de una variedad de variaciones en las características sexuales que quedan fuera de las concepciones tradicionales de los cuerpos masculinos o femeninos. Algunas de estas diferencias son evidentes al nacer, mientras que otras se notan más adelante en la vida, como durante la pubertad. Si bien menos personas tienden a tener conciencia de las personas intersexuales y los problemas que enfrentan, ser intersexuales es en realidad bastante común; aproximadamente el 1-2 por ciento de la población es intersexual, ¡comparable al porcentaje de personas que son pelirrojas!
Las cirugías intersexuales son procedimientos que no salvan vidas y que cambian las variaciones naturales en la apariencia genital o la anatomía reproductiva. Las cirugías intersexuales incluyen reducir o reposicionar un clítoris (que puede resultar en la pérdida de la sensación sexual), crear o alterar una vagina, mover una uretra que ya funciona y extirpar órganos que producirían hormonas sexuales (como la gonadectomía, que puede resultar en esterilización).
En lugar de basarse en la necesidad médica, la historia de las cirugías intersexuales se basa en perspectivas heteronormativas y patriarquicas sobre el sexo, el género y el matrimonio. A partir de mediados del siglo XX, los médicos comenzaron a realizar cirugías en bebés y niños intersexuales para que sus genitales parecieran más "normales". Además de tener el objetivo de reforzar una visión binaria del sexo y el género, la opinión predominante entre los médicos era que los jóvenes sentirían vergüenza por sus características intersexuales y que sin cirugía no podrían tener un matrimonio o una vida sexual normales. .
Debido a esta visión basada en la vergüenza, es posible que a estos jóvenes, e incluso a sus padres, no se les diga que son intersexuales. No es raro que los niños intersexuales no sepan que son intersexuales o que les mientan y les digan que las cirugías eran necesarias para prevenir el cáncer, en lugar de "normalizar" la apariencia de sus genitales.
Si bien algunas afecciones intersexuales pueden presentar problemas para producir o regular hormonas o pueden conllevar otros riesgos para la salud, para la gran mayoría de los bebés intersexuales, la intervención quirúrgica no es médicamente necesaria. Más bien, las cirugías intersexuales, la mayoría de las cuales se realizan cuando los niños tienen menos de 2 años, pueden generar daños de por vida. Estas cirugías pueden resultar en cicatrices, dolor crónico, incontinencia crónica, pérdida de la sensación sexual, esterilización, asignación de género incorrecta y trauma.
La práctica de realizar cirugías innecesarias en bebés y niños está en conflicto directo con la ética médica y los estándares de atención. Los estándares éticos requieren que los proveedores de salud permitan a los pacientes
Además, se debe considerar la prohibición de la cobertura de seguros de cirugías en jóvenes intersexuales para limitar esta práctica. Si bien sabemos que muchas personas transgénero enfrentan barreras para obtener programas de seguro que cubran su atención quirúrgica de afirmación de género, médicamente necesaria y éticamente sólida, las cirugías sin el consentimiento específico de los jóvenes intersexuales a menudo están cubiertas por el seguro. La cobertura de seguro a menudo está disponible porque estas cirugías se consideran "reconstructivas" o "correctivas", pero esta determinación se deja a los médicos, no a las personas intersexuales o sus familias, a pesar de que las cirugías intersexuales no son necesarias para "corregir" un problema médico.
Los activistas intersexuales han presionado directamente a los hospitales para evitar que se realicen cirugías intersexuales en sus instalaciones. En una victoria única para el movimiento, en julio de 2020, el Hospital de Niños Ann & Robert H. Lurie de Chicago anunció que ya no realizaría cirugías en bebés intersexuales que no pueden dar su consentimiento y se disculpó con las personas intersexuales que había sido perjudicado por su clínica de desarrollo sexual. De manera similar, en octubre de 2020, el Boston Children's Hospital anunció que dejaría de realizar dos tipos de cirugía intersexual (clitoroplastia o vaginoplastia) en niños demasiado pequeños para dar su consentimiento. Los activistas continúan abogando por que otros hospitales detengan las cirugías intersexuales, y en 2018 publicaron el
Las personas intersexuales, como todos los pacientes, tienen derecho a ser informadas sobre sus opciones de tratamiento y los riesgos asociados, a determinar su propio curso de tratamiento y a estar protegidas de procedimientos dañinos e innecesarios. Realizar cirugías innecesarias en bebés intersexuales no está a la altura de la ética médica y viola la autonomía corporal de las personas intersexuales. Los legisladores y defensores deben trabajar para promulgar protecciones para garantizar que la realización de tales cirugías en niños pequeños esté prohibida.
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