25 de Ene, 2021 . La protagonista, 'Esty', que a los 19 años se convierte en novia de un matrimonio concertado, entiende que su deber principal para con su nuevo marido es darle hijos. El placer sexual, en todo caso, es de importancia secundaria. En lugar de desarrollar una relación íntima amorosa y de apoyo, se hace hincapié directamente en la importancia de mantener feliz a su esposo. Un año después de la boda, todavía está luchando por tener sexo con penetración con su esposo. Desesperada, organiza una reunión con el 'asesor matrimonial' de la comunidad y le dicen que tiene vaginismo. Le dan dilatadores vaginales y le dicen que haga sus "ejercicios". Se trata de una solución clínica al problema que culpa a Etsy y su incapacidad para cumplir el papel que se le ha asignado. Sus posibles problemas mentales y emocionales se ignoran como si no tuvieran importancia.
Habría sido muy gratificante trabajar con una pareja como Esty y su esposo, y es una pena que (ALERTA DE SPOILER) no hayan podido resolver sus dificultades y quizás salvar su matrimonio. No pude evitar sentirme triste por este final y me pregunté cuántas relaciones, seculares o no seculares, han llegado a un final abrupto debido a algo que potencialmente podría ser trabajado, explorado y mejor entendido. Porque dar voz a lo que el cuerpo está comunicando puede ser sanador para ambos.
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