23 de May, 2023 . Según las denuncias formuladas en su contra ante el tribunal, Espósito Valenti, la madre de Lucio, y Páez, su novia, mataron a Lucio en algún momento entre las 17.30 y las 19.40 horas. Fue la culminación de meses de abuso, según los fiscales.
Las dos mujeres inicialmente afirmaron que Luico había sufrido una caída accidental durante un intento de robo en su casa, pero ambas fueron arrestadas poco después de la muerte del niño, ya que las pruebas médicas revelaron horrores anteriores.
La fiscal Verónica Ferrero, citando una autopsia practicada al cuerpo del niño muerto, habló de continuos maltratos físicos, aludiendo a lesiones de larga data. Consideró que Lucio fue víctima reiterada de maltrato y abuso físico y sexual en los 18 meses previos a su muerte.
Más de 100 testigos han declarado en el juicio, con vecinos y familiares que ofrecen relatos de incidentes que sirvieron como advertencias de irregularidades. Los dibujos de Lucio incluso se han ofrecido como prueba del abuso crónico que sufrió.
Además del cargo de homicidio, Esposito Valenti y Páez han sido acusados de abuso sexual agravado gravemente ultrajante debido a las circunstancias extremas del crimen ("acceso carnal anal con un objeto"). Los cargos son agravados debido a la edad de la víctima, la hecho de que estaba a su cuidado y debido a "la crueldad y la premeditación".
Un abogado que representa al padre de Lucio también ha pedido que se incluya el agravante de "odio de género", alegando que los acusados tienen "una clara aversión a todo el estereotipo masculino". Los fiscales no apoyan esta última alegación.
Los mensajes de chat mostrados en la corte indican que el abuso de Lucio fue histórico, crónico y continuo. Brindan evidencia de abuso físico y psicológico continuo y muestran que los acusados adoptaron y acordaron estrategias para encubrir signos de maltrato, en caso de que amigos, familiares o maestros de la escuela del pequeño hicieran preguntas.
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