11 de May, 2023 . La encuesta del Washington Post/ABC publicada durante el fin de semana fue algo atípico al mostrar que Biden estaba detrás de Trump y Ron DeSantis por niveles fuera del margen de error. (La misma encuesta mostró que el 66 por ciento de los estadounidenses se opuso a prohibir la mifepristona, un fármaco abortivo, lo que solo debería intensificar los temores de que la situación descrita en el párrafo anterior pudiera llegar a suceder). Incluso si la muestra de la encuesta se inclinó un poco hacia los votantes republicanos, sus hallazgos sobre las debilidades de Biden deben tomarse en serio. El más importante de ellos es el hecho de que Biden comenzaría su segundo mandato a los 82 años y lo terminaría a los 86, y el hecho de que ya está mostrando su edad, en gran parte porque no aparece con mucha frecuencia. La suya no es una presidencia de conferencias de prensa o discursos desde el Despacho Oval, y si este mimo le ahorra algunas pifias al mantenerlo fuera del ojo público, también lo mantiene fuera del ojo público. Solo el 32 por ciento de los encuestados dijo que Biden tiene ?la agudeza mental que se necesita para servir de manera efectiva como presidente? y solo el 33 por ciento dijo que tiene ?suficiente salud física para servir de manera efectiva como presidente?. (Sospecho que estos escépticos de Biden incluyen a aquellos que pueden pensar que está bien ahora, pero que no lo estarán para el 2028). ya sea Trump o DeSantis.
Puede que no. Sus respuestas a las críticas de que es demasiado viejo a veces sonaron tan quejumbrosas que solo confirman las aprensiones de sus críticos. Cuando se le preguntó en MSNBC el viernes pasado por qué, a pesar de su edad, era la persona adecuada para el puesto de presidente, Biden respondió: ?Porque he adquirido mucha sabiduría y sé más que la gran mayoría de la gente?.
En este momento, los demócratas están a la deriva con inquietud hacia una cascada y esperan que Biden pueda navegar de alguna manera por la turbulencia que se avecina. Para el otoño, si no ha tenido un éxito mensurable en jugar la carta de la libertad y, al hacerlo, disipar gran parte de los temores del público de que un presidente se esté acercando a la senectud, entonces algún demócrata prominente (una categoría que no incluye a Robert Kennedy Jr. . o Marianne Williamson) sería mejor que participara en la carrera.
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