Anorgasmia ¿Se puede aprender a tener un orgasmo? ·

Anorgasmia ¿Se puede aprender a tener un orgasmo? · https://www.misexologo.com/blog La actual es una era en la que el sexo está presente en todos los medios posibles. La sociedad está muy sexualizada y esta práctica aparece en la ropa, en cómo nos relacionamos, en la tecnología, en la publicidad Misexologo.com https://www.misexologo.com

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21 de Nov, 2019 . La actual es una era en la que el sexo está presente en todos los medios posibles. La sociedad está muy sexualizada y esta práctica aparece en la ropa, en cómo nos relacionamos, en la tecnología, en la publicidad ... constantemente aparece el sexo en el día al día.

Esto ha llevado a que la falta de sexo se convierta en un tabú y que, cuando el sexo que se practica es de baja calidad, tampoco sea un tema del que se hable con gusto. A esto se suma que seguimos viviendo en una sociedad muy machista y los problemas de las mujeres afectadas a ocultarse.

Con respecto al sexo, habla de disfunción eréctil o de viagra, pero pocas veces habla de la falta de orgasmo o anorgasmia, y mucho menos de la anorgasmia femenina. Un estudio australiano de 2011 publicado en la revista ?Journal of Sexual Medicine? afirmaba que alrededor del 35% de las mujeres participantes confesó no haber experimentado nunca un orgasmo.

Aunque el estudio ya tiene sus años, el orgasmo femenino sigue siendo un tema del que no hay muchos datos, pero los expertos aseguran que tiene solución. Así al menos lo afirma la sexóloga Valerie Tasso, una profesional de la divulgación sexual que lleva más de 15 años escribiendo libros, impartiendo charlas y participando en programas divulgativos.

Según sus palabras, la anorgasmia y otros problemas sexuales deben ser tratados como una dificultad, no como una disfunción. Cuando la sexología está en manos de médicos, se patologiza mientras que si se pone en manos de sexólogos, esta actividad gana en valor.

La anorgasmia se manifiesta de dos maneras. Por un lado están las mujeres que jamás hayan sentido un orgasmo y por el otro lado las que solo lo hayan de manera secundaria, las que hayan sentido alguna vez, en pareja o en solitario, pero no alcanzan el grado de clímax en sus relaciones sexuales con frecuencia.

La solución, según los sexólogos es trabajar el imaginario. Todos tenemos deseos eróticos, por supuesto también las mujeres que no alcanzan el orgasmo, pero es cierto que ese deseo erótico hay que trabajar porque a veces cae en letargo.

Valerie Tasso sostiene que la alta exigencia que marca la sociedad en cuanto al sexo, tanto en pareja como en solitario, y los modelos sexuales que se les imponen a las mujeres, habitualmente inalcanzables, es lo que alguna vez a muchas mujeres a una necesidad de perfección poco real que acaba ocasionando problemas como la anorgasmia.

Entre esos juguetes sexuales al alcance de las mujeres, está alcanzando mucha fama en los últimos meses el succionador de clítoris. El clítoris es la única zona corporal en la anatomía del ser humano específicamente exclusivo para dar placer. En el clítoris se concentran millas de terminaciones nerviosas.

En esta línea encaminada a naturalizar la sexualidad femenina como camino para dejar atrás la anorgasmia y disfrutar de una sexualidad plena, hay casos de psicólogos que recomiendan el uso de succionadores de clítoris, los famosos Satisfyer o Lelo Sona.

La idea no es otra que hacer que las mujeres pierdan el miedo o la tensión de no llegar al orgasmo estando en soledad y poder potenciar el disfrute posteriormente en pareja o simplemente cuando se practica sexo individual. Los succionadores de clítoris prescriben muchos psicólogos, sexólogos y terapeutas como una herramienta que sirve de ruptura con la parte psicológica que produce la anorgasmia.

Más allá del succionador de clítoris y la anorgasmia, la falta de satisfacción sexual es un tema que preocupa a muchas mujeres pero que, poco a poco se intenta poner fin a eso, gracias a la sexualidad está dejando de ser un tema tabú en muchos círculos.

Aún queda mucho camino por recorrer, pero normalizar las conversaciones sobre el sexo es el primer paso para disfrutar de una vida sexual plena. El sexo es salud, y no es una actividad de la que avergonzarse ni que tiene que ser ocultada deliberadamente.