Adicción a la pornografía: atravesar el entretenimiento para adultos puede reconfigurar el cerebro a un estado más infantil, dejando a los adictos propensos a tomar malas decisiones.
Bajo deseo sexual Misexologo
6 de Ago, 2020 . Ver pornografía puede erosionar una región del cerebro y convertirlo en un estado más infantil. Como resultado, los espectadores son propensos a tomar malas decisiones, según Rachel Anne Barr, investigadora de Neurociencia, Université Laval, Canadá.
El trabajo de Barr muestra que atracarse en la pornografía podría afectar la corteza prefrontal, una parte del cerebro que controla la moralidad, la fuerza de voluntad y el control de los impulsos. Esta región está subdesarrollada en los niños, lo que explica por qué tienen problemas para controlar sus impulsos y emociones.
"Las propiedades del video porno lo convierten en un detonante particularmente poderoso para la plasticidad, la capacidad del cerebro para cambiar y adaptarse como resultado de la experiencia. Combinado con la accesibilidad y el anonimato del consumo de pornografía en línea, somos más vulnerables que nunca a su hiperestimulación efectos ", escribe Barr en The Conversation.
Algunos científicos creen que los efectos del consumo de pornografía y el abuso de sustancias podrían ser similares, ya que ambos usuarios experimentan problemas de adicción. Esto se debe a que las escenas pornográficas, como las sustancias adictivas, conducen a niveles anormalmente altos de una sustancia química llamada dopamina en el cerebro, argumentan los expertos.
Según Barr, es "algo paradójico" que el entretenimiento para adultos pueda revertir el cableado cerebral a un estado más juvenil. "La ironía mucho mayor es que, si bien la pornografía promete satisfacer y proporcionar gratificación sexual, ofrece lo contrario", dice.
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